martes, enero 08, 2013

INCENDIOS FORESTALES EN SANTANDER




Fueron varios incendios forestales que quizás tuvieron una sola fuente de inicio. En conclusión tres frentes de trabajo extensos que requirieron la intervención de centenares de voluntarios.

La conflagración se inició el domingo seis de enero de 2013, en Piedecuesta iniciamos la intervención sobre las diecisiete horas, en el municipio de Los Santos ya llevaban varias horas de operaciones y lo mismo ocurría en Motoso, una vereda del Municipio de Girón. Finalmente la montaña confluye en esos tres municipios.

El municipio de Los Santos tuvo la fortuna de que la zona afectada se encontrara relativamente deshabitada, pero igual las pérdidas fueron millonarias, en la jurisdicción de Piedecuesta el fuego consumió totalmente una vivienda y otra fue afectada parcialmente, en Girón la afectación fue sobre zonas de cultivo.

Germán Valenzuela Sánchez, periodista y escritor piedecuestano se refería así en “Piedecuesta Periódico”:
“… y se alcanzaban a ver colinas prendidas, por los múltiples inconvenientes que se presentan, uno de esos, la lejanía y las dificultades del terreno para controlar las llamas que ayudadas por las corrientes del aire hacen imposible la labor de las efectivas unidades de apoyo de los bomberos de Floridablanca y Piedecuesta, para frenar los lengüetazos de fuego que se veían salir en cada loma por donde iba pasando y por donde la candela dominaba los altos riscos a pesar de las brigadas de voluntarios moviéndose en carros, motos, semovientes y bicicletas buscando la forma de apagar el fuego.

Los finqueros unidos en un haz de voluntades, incluyendo la Defensa Civil, la Policía Nacional, corrían de un lugar a otro, con aparceros, obreros y voluntarios buscando salvar sus pertenencias que ponían su grano de arena en ésta nueva conflagración tan fuerte que viene provocando el verano, y que al decir de algunos localistas se originó desde la cárcel de Palogordo mientras que otros aseguran que su inicio arrancó en las veredas de Pajonal y Monterredondo de Piedecuesta.
Fuera lo uno o lo otro lo único cierto de ésta tragedia de incendios en Colombia debido a la fuerte sequía, es que es muy duro ver a una familia campesina vivir en una parcela y de un momento a otro por culpa de la naturaleza de la noche a la mañana quedar sin nada. Era muy triste ver que ellos, los moradores no pudieran hacer absolutamente nada para evitarlo, así, lo pudimos observar, unas humildes familias veían arder su nevera, su cocineta, su alcoba, su comedor, y desaparecer en segundos y quedar reducida en cenizas su vivienda, y demás enseres sin poder hacer nada, porque por allí hasta el agua escasea, siendo la Navarra y Mesitas de San Javier las veredas que más vegetación presentan comparadas con las de Chicamocha, El tabacal, La Esperanza entre otras.
Hasta el momento van arrasadas 300 hectáreas donde habían sembrados de frutales y hortalizas provocando pérdidas millonarias. Una cosa es contar y la otra ver las tragedias que el mundo entrega a sus habitantes tanto del casco urbano como rural.”
La atención de estos tres incendios forestales requirió la intervención de varios centenares de hombres, fueron muchas las entidades que hicieron su aporte, Policía Nacional, Ejercito de Colombia, Defensa Civil y obviamente nuestros bomberos colombianos que con herramientas manuales enfrentaban el fuego incontrolable, Bomberos Voluntarios de Floridablanca, Piedecuesta y Los Santos y los bomberos oficiales de Bucaramanga, hombro a hombro, combatían el incendio pero los efectos de una labor prolongada por más de veinticuatros horas empezaban a sentirse.


El Teniente Eduardo Pacheco con sus Bomberos Voluntarios de Floridablanca distribuía su apoyo a los Municipios de Los Santos y Piedecuesta que finalmente contó, de manera adicional, con la oportuna llegada del Subteniente HECTOR YESID PARRA MANTILLA, comandante del Cuerpo de Bomberos Voluntarios del municipio de Páramo, quien en compañía de diez (10) de sus voluntarios cruzó el Cañón del Chicamocha en una travesía de más de tres horas, para apoyar a los extenuados Bomberos Voluntarios de Piedecuesta. Su intervención fue definitiva, entraron a las seis de la tarde del lunes 7 de enero a la Vereda Monterredondo, foco donde el fuego se manifestaba más persistente y con el suministro de agua de un camión cisterna del Cuerpo de Bomberos Oficial de Bucaramanga, lograron la extinción total del fuego a las 12:00 horas. Continuaba la conflagración en Girón y Los Santos.


En el entretanto, desde Bogotá, los señores Capitán Andrés Miranda Montenegro y Teniente Edwin Gonzales Malagón, desde el Ministerio del Interior, adelantaban los engorrosos trámites que había que adelantar para que un helicóptero acudiera a apoyar el control del fuego en esos sitios inaccesibles para los bomberos. Hoy martes 8 de enero de 2013 el helicóptero adaptado con su equipo “bambi” sobrevolaba la zona del incendio. El fuego aún no se ha controlado en Motoso – Girón, pero el Capitán Miranda nos confirmó que la aeronave permanecerá en la zona hasta que el fuego sea totalmente controlado.






Sea esta la ocasión para exaltar la labor de los diferentes oficiales que han tenido que ver con la atención de esta gran emergencia. Señores y señora comandantes de los Cuerpos de Bomberos Voluntarios de las zonas afectadas, el Comandante de Páramo, el Capitán Miranda y Teniente González Malagón, su aporte fue muy importante para devolverle la tranquilidad a la ciudadanía. Y un aplauso enorme a todos los voluntarios que dejaron su sudor y su aliento en la zona. Los habitantes de Motoso - Girón, La Navarra y Monterredondo -Piedecuesta y Los Santos, los recordaran con aprecio.